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7 DE ABRIL DÍA MUNDIAL DE LA SALUD
LA CTA AUTÓNOMA Y LA CTA DE LOS TRABAJADORES DE ARGENTINA DENUNCIAN EL AGRAVAMIENTO DE LAS CONDICIONES DE SALUD DE LA POBLACIÓN
“LA ERA DE LA CRUELDAD. MILEI MATA”
La Argentina atraviesa un momento histórico de extrema criticidad. La gestión del gobierno de Milei reinaugura un proceso ya conocido en la Argentina de concentración, extranjerización y despojo, remozado con un marcado estilo autoritario, de presunta impunidad y autocracia.
Desde el mismo momento de su asunción, allá por diciembre del 2023, no ha cesado el agravio en contra de los derechos más elementales de las y los argentinos, que va escalando en un deterioro severo de las condiciones de vida, aumento de la pobreza, desmantelamiento de la estructura laboral, y depredación de las estructuras del Estado que incluye áreas sensibles como Discapacidad, Jubilados y pensionados, infancias, géneros, entre otros. Todo esto sustentado por un dispositivo represivo material y normativo que hace centro en dirigentas y dirigentes de organizaciones populares en procura de subordinar y disciplinar las expresiones de la protesta y el descontento.
El campo de la Salud también ha sido foco de particular agresión.
Se ha procedido al vaciamiento e inviabilidad operativa de hospitales paradigmáticos del sistema Público y solidario de Salud como el Hospital Nacional de Salud Mental Laura Bonaparte con más de 200 despidos y no renovación de más de 1.000 contratos. Así mismo en el Hospital Baldomero Sommer, ubicado en la localidad de General Rodríguez en el oeste del Conurbano Bonaerense, fueron despedidos a inicios de año 130 trabajadorxs. En el Hospital Nacional Posadas 120 despidos, y en el Hospital pediátrico Garrahan se aprobó un plan de reestructuración que augura más precarización de sus trabajadores y dificultades operativas críticas de un centro de excelencia suprema en la atención de enfermedades de las niñeces.
Se ha renunciado a la Producción Pública de Medicamentos con el cierre de la agencia nacional de laboratorios públicos ANLAP en medio de un aumento desmedido y salvaje de los precios de los medicamentos incluso por encima de los niveles de inflación.
Se han desfinanciado y debilitado programas en forma directa a través de su cierre o desmantelamiento, o indirectamente a través de la drástica reducción de fondos a las provincias y/o municipios del interior del país. Incluyen esta lista programas de atención territorial y provisión de medicamentos, de patologías como Tuberculosis, Hepatitis B y C y VIH; también se procedió a desactivar el programa “Médicos Comunitarios”, un programa de fortalecimiento de los dispositivos de atención primaria de los territorios.
A comienzos del 2024 la DADSE, Órgano Estatal de Provisión de medicación de alto costo para enfermedades raras y oncológicas suspendió sus prestaciones con el pretexto de realizar auditorías internas. Las organizaciones de usuarios denuncian al menos 60 muertes de pacientes por discontinuidad de la medicación.
En el marco de una avanzada discursiva homofóbica y antifeminista, se discontinuó la provisión de insumos y Anticonceptivos para el programa de Salud Sexual y Reproductiva, se desactivó el programa de prevención del embarazo adolescente, y otros dispositivos de cuidado y atención de mujeres y diversidades. Recientemente el gobierno disolvió el Instituto Nacional del Cáncer suspendiendo la provisión de medicación para cuidados paliativos y los programas de vigilancia epidemiológica.
Han sido foco de particular crueldad, los cambios en las políticas públicas para personas con Discapacidad; se prevé la baja de casi 200 mil pensiones en el presupuesto 2025, una reducción presupuestaria de un tercio respecto del año anterior de la Agencia Nacional de Discapacidad, además de importante depreciación de los aranceles a prestadores de servicios educativos, de transporte y de salud.
Así como el retirar en el PAMI la gratuidad de los medicamentos a las y los jubilados, y el retiro de la cobertura de tratamientos para miles de pacientes oncológicos y de provisión de tratamientos inmunosupresores a pacientes trasplantados insolventes del Programa de Seguimiento Postrasplante y debilitamiento de todos los programas del INCUCAI.
Se calcula en cientos los despidos y cesantías en el Ministerio Nacional de Salud en áreas esenciales como VIH, Hepatitis, Lepra, ITS, Tuberculosis y Vacunas, además de otras áreas como Zoonosis, Vectores, Medicamentos, Salud Bucodental y Epidemiología.
En este desguace despiadado se suma el futuro incierto del Instituto Nacional del Cáncer, ya que fue incorporado en una escala menor a un programa de Enfermedades no Transmisibles, poniendo en duda objetivos y gestión para la comunidad enferma.
Los despidos masivos de ACUMAR, pone de relieve el desinterés de políticas ambientalistas que están impactando claramente en el futuro de nuestro pueblo.
Por último, hace pocos días, el dislate del Presidente en sus relaciones carnales con el también tenebroso Donald Trump, anunciando el retiro de Argentina como miembro de la OMS.
Puede decirse sin dudar que este proceso de abandono del Estado en su rol de garante del derecho a la Salud, se vincula con las ideas y el proceso de la privatización de la salud pública para dejarla en manos de las empresas y el negocio de la enfermedad. Pero tampoco se puede dudar en afirmar las consecuencias de aumento de enfermedad y muerte que este proceso está deparando en el conjunto de las mayorías populares (adultxs mayores, personas con discapacidad, minorías étnicas, mujeres y diversidades, personas con cobertura estatal única). El mapa sanitario se inserta en la descomposición que el gobierno ejecuta en todas las áreas de las Políticas Públicas y el Estado.
La resistencia de las organizaciones populares en general y del movimiento de trabajadoras y trabajadores en particular, ha estado y seguirá estando a la altura de las circunstancias enfrentando represión, persecución y discursos de odio. El movimiento sanitario y los colectivos de defensa de fuentes de trabajo, programas y hospitales intentan retomar sinergias y voluntades para enfrentar esta nueva etapa de hegemonía del negocio de la enfermedad.
En este 7 de abril, Día Mundial de la Salud, la CTA-A y la CTA-T, dos de las Centrales de trabajadores más importantes de la Argentina, y sus organizaciones integrantes sindicales y sociales, no sólo repudiamos y resistimos este nuevo embate, sino que denunciamos y alertamos sobre el costo en vidas que dicho proceso desencadena y desencadenará.
Un verdadero genocidio planificado que debe ser denunciado al conjunto de nuestro pueblo y ámbitos nacionales e internacionales que amplifiquen e intervengan en esta coyuntura dramática de la Argentina.
Nos comprometemos a impulsar la movilización unitaria para enfrentarlo, apoyando todas y cada una de las luchas de trabajadores de la salud, usuarios, organizaciones científicas y sociales que hoy defienden el derecho a la salud en todo el país.
POR LA CTA AUTÓNOMA: COORDINACIÓN NACIONAL DE SALUD ATE ARGENTINA – FESPROSA - IDEPSALUD ATE ARGENTINA
POR LA CTA DE LOS TRABAJADORES: FESINTRAS - ESPACIO INTERSINDICAL SALUD Y TRABAJO
RESTO DE SINDICATOS Y ORGANIZACIONES DE AMBAS CTAs
