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A 20 años de la asunción de Néstor: La Plaza de la Patria con Cristina
La Central de Trabajadores y Trabajadoras de la Argentina estuvo presente en una Plaza de Mayo repleta para escuchar las palabras de la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, en un 25 de Mayo lluvioso y a 20 años de la asunción de Néstor.
En un elocuente discurso, ante mas de medio millon de personas, Cristina planteó tres ejes programáticos: unidad nacional frente a la elaboración de un programa de reestructuración del pago de la deuda externa, con un porcentaje de la recaudación de las exportaciones. Señaló que “fue un préstamo político y política también tiene que ser la solución”, y propuso investigar “la deuda y sus responsables”. Pidió que “dejen de querer destruir la industrialización” y que se necesitan “trabajos de calidad y buenos salarios”. “Se puede hacer, porque lo hicimos. Tenemos recursos estratégicos”, y se refirió a la recuperación por parte del kirchnerismo de Vaca Muerta y a la necesidad de darle valor agregado al litio, exportando productos terminados (baterías) y no el mineral, la materia prima.
También propuso renovar el pacto democrático, y en ese sentido explicó que “con ganar en las urnas alcanza”, que “no hay por qué llegar al exterminio del adversario”. Y por último remarcó que hay que volver a darle al país un poder judicial democrático y digno, “no podemos seguir con la rémora monárquica judicial”.
“Cristina trazó los ejes para la pelea que viene, el enorme desafío de no solamente ganar una elección, sino hacerlo con un programa, con un lineamiento que Cristina planteó. Creo que Cristina después de hoy queda claramente referenciada como la figura que imprescindiblemente va a definir el rumbo a seguir y nuestro pueblo volvió a pedirle con ese ‘una más y no jodemos más’, que sea la que conduzca una vez más el país. No solamente la fuerza política estratégicamente, sino también el país. Y bueno, vamos a empezar a batallar en el sentido que dijo Cristina. Fue muy clara al decir que no es una tarea que la resuelva una sola persona. No hay omnipotencia, y en ese sentido creo que nos deja a nosotros un compromiso muy grande”, expresó luego del acto, a los medios, el secretario general de la CTA y diputado nacional, Hugo Yasky.
“Esta Plaza es testigo de nuestras alegrías, pero también de días tristes”, definió Cristina y rememoró: “Fue poblada de represión a Madres y a Abuelas”, en los años previos a la asunción de Néstor, en que arreciaba la crisis económica, social y política en Argentina. “Se apropiaron de los depósitos a plazo fijo”, un Ministro de Economía “calvo y de ojitos claros” (en alusión a Domingo Felipe Cavallo). “Kirchner era un simple abogado como yo, pero fuimos los ‘kukas’ los que pagamos la deuda y los depósitos del corralito”, remarcó Cristina y agregó: “Genios de la economía, la deuda la pagamos nosotros. Néstor pagó la deuda más grande de la historia. Pagándole al Fondo, retomamos el timón económico”.
En otro tramo, recordó que “Argentina estaba devastada por la desocupación” y remató: “No es pecado pagar buenos salarios. Al contrario, es de buenos cristianos”, y recordó que durante los gobiernos kirchneristas, “el salario de los trabajadores era el más alto de América latina”. También dijo que “tuvimos la mejor jubilación de la región” y “en mi gobierno fue donde más ganaron los trabajadores”. Propuso a continuación una “alianza entre lo público y lo privado” e insistió: “No podemos seguir teniendo una economía dolarizada”, y “no podemos seguir atados a los precios internacionales”.
Ante la consulta a Yasky sobre si todavía hay ilusión respecto a su candidatura, el titular de la CTA contestó: “Sí, sobre todo por lo que vi en la gente. Ese fervor, esa convicción, esa energía que se generó entre Cristina y la gente cuando le decían ‘¡¡¡Cristina Presidenta!!!’ y ‘¡¡¡Una más y no jodemos más!!!’. Ella va a decidir y sabe que cuenta con el respaldo de nuestro pueblo. No quiero decir más sobre esto porque lo dijo la gente. Fue tan clara, tan unánime, tan sólida. Era como una especie de bloque macizo que generaba esa energía que creo que Cristina sintió. Sabe que no es un problema de incomprensión de texto, es otra cosa. Ahora Cristina se va con esa imagen y creo que va a seguir pensando”.
En uno de los fragmentos más fuertes, Cristina dijo que ella era del pueblo “y de ahí no me muevo, aunque me quieran matar”. Y planteó: “Es necesario construir organización territorial en los sindicatos, y que tomen la posta y lleven adelante el programa de nuestro gobierno”.
