Mantener la memoria alerta

Sos increíble! Serías capaz de discutirle hasta la propia muerte si se te presentara”, le dice entre suspiros Perón a Evita mientras la abraza. La escena transcurre luego de una discusión ocurrida entre ellos a pocos días del 22 de agosto de 1951, cuando se realizó el Cabildo Abierto del Justicialismo convocado por la CGT, que resuelve pedirle a Eva ser la candidata a vicepresidente. La cita forma parte del capítulo ocho de Diálogos Fundamentales del Bicentenario, una miniserie producida por SUTEBA y dirigida por Lucía Cedrón, que recrea 13 momentos clave de los 200 años de historia de nuestro país. La revisión arranca con el encuentro entre San Martín y Bolívar en Guayaquil con sueños de Patria Grande hasta el encuentro entre Kirchner y Lula en Mar del Plata en 2005, cuando se acuerda rechazar el ALCA e incluir a Venezuela en el Mercosur.

En sólo dos meses de filmación, Malena Solda y Luis Machín (junto con Roberto Carnaghi y Carlos Defeo) enfrentaron el desafío de interpretar –como elenco estable de todos los capítulos– a distintos personajes que marcaron nuestro pasado y definieron el presente. De San Martín a Néstor Kirchner, de Evita a Lidia Papaleo (viuda de David Graiver), en el caso Papel Prensa.

“Me encanta la historia pero nunca había hecho ningún personaje histórico nacional”, cuenta Malena Solda. “La que más me gustó fue Eva. No contamos la historia clásica de su vida, la idea de Lucía Cedrón fue tomar sólo los nueve días desde que la CGT la propone como vicepresidenta hasta su declinación. ¿Qué pasó en esos días? Intentamos representar el vínculo entre Perón y ella, y eso me gustó muchísimo, porque la humanizó. Mostramos sus ganas de hacer algo por el país y también sus inquietudes y contradicciones, las circunstancias que la rodeaban, su enfermedad, lo que podía pasar en una pareja en ese contexto, fue muy interesante, también disfruté mucho de trabajar con Luis (Machín) y fue fundamental la peluca que me consiguieron porque me dio mucha confianza para interpretarla.”

“En total hice doce personajes, porque dos veces fui Perón”, detalla Machín repasando los roles que encarnó. “Dentro de esa cantidad hay personajes con los que ideológicamente no acuerdo un ápice, personajes de una envergadura moral e ideológicamente menor como Videla, Domingo Cavallo o Alexander Haig que, en lo personal, no me despiertan ningún interés. Yo he compuesto a pederastas, asesinos, y como actor no puedo hacer un juicio de valor, porque si no no los podés hacer. Por supuesto que cuando son más cercanos ideológicamente hay otra cosa que se pone en juego.”

En el plan original de realización, había un par de roles que no iban a ser interpretados por ningún actor. El diálogo entre Néstor Kirchner y Luiz Inácio Lula da Silva iba a ser el único episodio documental ilustrado con imágenes reales de ambos mandatarios, pero se cambió de idea. “Me anunciaron que querían que hiciera a Néstor Kirchner y para grabar en una semana ¡Me tomó por sorpresa!”, recuerda Machín sobre el momento en que se enteró que debía componer al ex presidente. “Ni bien me lo propusieron, lo rechacé”, dice soltando una carcajada y luego explica: “Sentí temor porque entendí la responsabilidad enorme que implicaba. Es muy reciente su desaparición, todavía se lo escucha, se lo ve, está todo muy fresco. Y además soy el primer actor que lo ha hecho, y ser punta de lanza siempre es complejo y contradictorio por cómo iba a ser visto, qué se iba a pensar. Sigue gobernando su mujer. Seguramente Cristina Fernández de Kirchner va a ver ese programa. Bromeando decíamos: ‘¡Nos van a sacar a patadas! Nos van a decir que no somos dignos de hacer a ese hombre’”, cuenta sobre la instancia previa a la grabación que finalmente se aplazó hasta las últimas jornadas de realización. “Componer a Néstor Kirchner fue una de las experiencias más poderosas en mi carrera”, afirma.

A partir de la aprobación de la nueva Ley de Medios y la implementación del Sistema Argentino de Televisión Digital Terrestre, durante el año 2010, se abrieron concursos para posibilitar la financiación y realización de nuevo contenido. Así fue que SUTEBA Producciones en asociación con la Señal Comunitaria Canal 12 Lanús TV se presentó y ganó en el rubro serie de Ficción TV Digital Producidas por TV Pública y Señales Comunitarias Asociadas.

La particularidad que la productora del proyecto fuera un sindicato aportó un carácter educativo al contenido que entre los planes de difusión aspira a ser distribuido como material de estudio en las escuelas. “Cuando recibo un proyecto –señala Machín– me concentro en lo que se va contar, de qué manera, quiénes trabajan, cuál es el equipo, es novedoso que SUTEBA sea parte de la producción, el que dé el puntapié, como es novedosa la Ley de Medios que es lo que posibilita que un sindicato emprenda un proyecto de estas características. Si la propuesta fuera mala, hubiera dicho que no, como he dicho que no en muchas otras cosas.”

En cada capítulo de Diálogos fundamentales del Bicentenario hay dos instancias de ficción. “Hay una conversación entre una directora (Ana Celentano), un guionista (Damián Canduci) y un historiador (Julián Krakov), que hablan sobre el contexto histórico y la importancia de contar ese diálogo”, explica Solda. “Hay ensayos, un detrás de escena y luego el diálogo entre los protagonistas del episodio.”

La experiencia de transitar dos siglos de historia personificando distintos personajes y recorriendo desde la época colonial a la actualidad, le dejó a Solda “La sensación de que la mujer es un sostén emocional vincular del hombre, ese fue el rol que tuvo en la historia argentina, acompañar a los hombres que fueron fundamentales para el país. Pero ella también interpretó a un hombre porque fue la elegida para hacer a un joven José de San Martín: “A mí San Martín me cae re bien, me encanta. Me entusiasmó esa posibilidad de hacerlo, varoncito parecía mi hermano menor.”

Como conclusión, coinciden: “Diálogos fundamentales propone salir del Billiken y poder analizar la historia desde un punto de vista no tan simplista”, define Solda. Mientras ella habla, Machín afirma con la cabeza y destaca: “La democracia debía una ley como la Ley de Medios Audiovisuales que posibilita, por ejemplo, que en Córdoba, donde estoy trabajando ahora, en este momento se están haciendo cinco miniseries de ocho y 13 capítulos. Se abre mucho, se ve un cambio enorme en todo el país, un desarrollo de verdad más federal y lo más sorprenderte es que hay muchos jóvenes involucrados. Así que se vislumbra un panorama de realización que abarca a todos y no se concentra tan sólo en Buenos Aires.”

Publicado el 3 de Julio de 2011